Los perros saben indicar de forma muy gráfica la sumisión a otro perro. La expresión «sumisión» debe tomarse al pie de la letra. Un perro que quiere evitar posibles disputas, muestra su inferioridad y desprotección frente al agresor. En algunos casos extremos, por otro lado muy habituales, el perro se echa de espaldas, levanta un poco las patas y brinda su cuello y su vientre al animal adversario. En el enfrentamiento entre dos perros, mostrar sumisión supone una humilde oferta de paz. En cuanto a la relación con las personas, este gesto puede estar asociado con el deseo de recibir muestras de cariño. Un perro que, ante nuestra presencia, se echa de espaldas, no sólo nos dice que no tiene intención de hacer nada malo, sino que también quiere que le mostremos nuestro cariño. Y ¿cómo demostramos que le hemos comprendido?, pues acariciándole el vientre. De esta manera tan sencilla puede darse el entendimiento entre perro y persona.
En cambio, en algunas ocasiones este acto puede significar un intento de camuflarse. Para conseguir este efecto, los perros proceden con mucha cautela: examinan minuciosamente el olor de determinado lugar y, entonces, restriegan en ese punto parte de su cuerpo.
Una tercera explicación del acto de echarse de espaldas sería, simplemente, que lo hacen porque les proporciona placer y así se sienten bien. Todavía hay una cuarta explicación que casi todos los dueños de mascotas conocen: el perro se revuelca por motivos higiénicos; por ejemplo, después de un baño. Claro que, según cómo se revuelque, el estado de limpieza de nuestro perro tras el baño puede desaparecer por completo.
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yo tengo 1 perro que es raza basset haoos y el tambien se tira de espalda y ps me di cuenta de que quiere que lo acaricie siempre que llega alguien se tira de espalda para que lo acaricien ps aqui dejo me comentario bye
Tengo una perrita french podle de un año y medio de edad, es bastante activa y juguetona, mi perra «se hecha de espaldas» cuando quiere que la acaricien y la consientan generalmente es su modo de saludar a todo el que llega, levanta sus patas delanteras colocandolas en las piernas de quien llegue y luego se pone de espaldas, cuando tu dejas de acariciarla busca tu mano y si no ve respuesta de tu parte opta por ladrarte o morder suavemente tu mano, es muy curioso que con algunas personas que llegan no hace eso sino que se les ladra e intenta morderlas, en mi familia aún no sabemos que criterio utilizara ella para «elegir a las personas que quiere que la acaricien» creiamos que eran las personas que se tornan amigables con ella pero nos hemos dado cuenta de que no es asi, ni tampoco lo hace por personas conocidas o desconocidas… estamos descubriendo ese criterio de selección aún.